domingo, 1 de diciembre de 2019

El diseño curricular #dossier


Durante las dos sesiones correspondientes a este tema, realizamos un total de cuatro actividades que requirieron el uso de la tecnología y la red. Dos de ellas consistieron en un cuestionario elaborado a través de la plataforma Kahoot!, con la diferencia de que la primera fue individual y la segunda se llevó a cabo en grupos de entre tres y cuatro personas. Las dos siguientes utilizaron un enfoque colaborativo de la enseñanza y fuimos los propios discentes los que nos transmitimos la materia los unos a los otros. Para lograr esto, la primera propuesta consistió en un documento colaborativo a través de Documentos de Google y la segunda fue una presentación conjunta de Google Slides.

Para las dos actividades de Kahoot! se requirió el uso de nuestros dispositivos móviles, tablets u ordenadores. El docente nos facilitó el PIN de acceso a los cuestionarios y cada uno de nosotros eligió un nickname individual o grupal antes de comenzar. El objetivo de la primera actividad fue familiarizarnos con los distintos niveles de concreción curricular de la ESO y Bachiller y mostrarnos las distintas Instituciones que intervienen en el proceso. El segundo trataba sobre la EOI, la planificación, organización y gestión de sus niveles y pruebas de certificación. En ambos casos, se trataba de pruebas para la evaluación de conocimientos previos, sin embargo la segunda actividad se vio precedida por una breve introducción sobre el funcionamiento de las EOIs, y quizá fue esto lo que influyó en que obtuviese mejores resultados en esta. Si quisiésemos afianzar los conocimientos, sí que podríamos hacer un cuestionario tan largo como el de clase (entre 20 y 25 preguntas). En este caso, sin embargo, se pretendía evaluar los conocimientos previos, por eso creo que hubiese sido más efectivo utilizar un cuestionario más corto y completar cada respuesta con una explicación aclaratoria  después de completar el juego porque, durante el cuestionario, la energía del momento puede hacer que el alumnado se distraiga y no atienda a la explicación.

La organización de las actividades de aprendizaje colaborativo también fueron una grupal y la otra individual. En la primera, cada grupo se ocupó de hacer una búsqueda concretada por el docente en la LOMCE y en la segunda cada individuo se centró en un punto importante dentro de los documentos que gestionan la EOI. Ambas actividades acabaron con una presentación ante nuestros compañeros que pretendía que la materia llegase a nosotros desde nuestros iguales. El docente actuó de guía durante la elaboración de las actividades, para asegurarse de que cada uno de nosotros nos dirigíamos hacia el fin deseado. Durante las presentaciones por grupos, se nos pidió realizar una coevaluación del grupo que presentó antes que el nuestro y esto resultó positivo en tanto que las valoraciones que recibimos fueron muy positivas. Mi única pega a este tipo de ejercicios (especialmente si queremos aplicarlos con adolescentes), es que las presentaciones representan una fuente de ansiedad y, como tal, esto puede hacer que los alumnos estén más preocupados y nerviosos por su propia presentación que de atender a sus compañeros.

En conclusión, creo que estas actividades fueron un éxito en el aula en tanto que las realizamos sin ningún contratiempo y considero que adquirimos cierto porcentaje de la información que revisamos y nos transmitieron nuestros compañeros. Sin embargo, creo que, en especial las actividades de trabajo colaborativo requieren de un clima amistoso dentro del aula, así que no en todos los grupos funcionarán.

1 comentario:

Uxía Piñeiro Ogando dijo...

¡Hola Noemí, compañeras y compañeros!
Me ha gustado mucho tu post y has explicado con todo lujo de detalle las actividades que hemos realizado durante estas sesiones.
Coincido contigo en que las actividades de Kahoot! nos ayudaron a reforzar los conocimientos sobre la materia y, como bien indicas, el cuestionario sobre las EOIs resultó más efectivo al estar continuadas la explicación teórica y la realización del Kahoot!
Además, también estoy de acuerdo contigo cuando mencionas que las presentaciones orales (individuales o en grupo) nos provocan nerviosismo y, por lo tanto, no prestamos demasiada atención a lo que nuestros/as compañeros/as nos pretenden explicar. Sin embargo, sigo considerando que la realización de esas breves presentaciones son una práctica útil para nuestro futuro como docentes. Así, ponernos en esas situaciones "límite" - sin casi tiempo de preparación de lo que debemos explicar - puede llegar a ser un ejercicio necesario para perder el miedo a hablar en público y a improvisar explicaciones. Quizás no procesamos al 100% la información de la materia dada por los/as compañeros/as, pero ganamos experiencia práctica sobre las exposiciones orales.

Traslado una pregunta al resto del grupo: ¿qué opináis al respecto? ¿Consideráis necesaria la práctica oral usando estas técnicas?

¡Un saludo!